El hallazgo abre la puerta al desarrollo de terapias individualizadas para una enfermedad que afecta nada menos que a una cuarta parte de la población adulta.
Una investigación internacional que ha contado con la participación del laboratorio vasco CIC BioGune ha descubierto que existen tres tipos diferentes de hígado graso no alcohólico, lo que es lo mismo, dañado por causas ajenas al consumo abusivo de alcohol. El hallazgo abre la puerta al desarrollo de terapias individualizadas para una enfermedad que afecta nada menos que a una cuarta parte de la población adulta mundial.
El hígado graso es la patología que explica por qué muchas personas sufren cirrosis o acaban necesitando un trasplante hepático sin haber sido grandes consumidores de alcohol. El hígado es la depuradora del cuerpo humano, el órgano encargado de descomponer las grasas que llegan al organismo y prepararlas para su posterior digestión y absorción. La mala dieta y la falta de ejercicio físico están detrás del auge de esta patología, que afecta al 90% de las personas obesas. En sus formas más agresivas, acaba degenerando en hepatitis y cirrosis.
El laboratorio que dirige el científico José María Mato llevaba varios años en este trabajo, que ha contado con el apoyo de casi una veintena de grupos de investigación y hospitales de Europa y Estados Unidos de primera línea. Los científicos analizaron el colesterol y los triglicéridos (lipidomas séricos) de 1.154 pacientes de distintos países y verificaron que existen al menos tres subtipos de la enfermedad. El hallazgo, que aún tardará años en tener utilidad clínica, posibilitará el diseño de terapias ajustadas a las necesidades de los afectados de cada uno de estos tres grupos.
Fuente: elcorreo.com