INTRODUCCIÓN

La hepatitis B es una enfermedad hepática causada por el VHB (virus de la hepatitis B). Desde 1982 existe una vacuna para prevenir la infección por el VHB, pero esta enfermedad representa aún un problema sanitario de gran magnitud a nivel mundial y es uno de los mayores desafíos globales de Salud Pública por ser un virus endémico en muchas partes del mundo.

La información sobre la Hepatitis B la podéis encontrar en los apartados y subapartados en los que se subdivide esta información y que están desglosados a la derecha de la pantalla.

La hepatitis provocada por el VHB (virus de la hepatitis B) es una enfermedad hepática que puede ser aguda y autolimitada o puede evolucionar a crónica. También puede cursar con reagudizaciones. La infección por el virus de la hepatitis B puede prevenirse con la vacuna, que es muy eficaz y segura, protege frente a la infección por el virus B y, por consiguiente, de la sobreinfección o coinfección por el virus delta (VHD) que sólo ocurre en los portadores del virus B. La vacunación está teniendo un impacto innegable en la prevención de la infección y de las complicaciones asociadas a ella, en los países en los que se administra a todos los recién nacidos y a las poblaciones en riesgo. La vacunación anti-VHB, en personas sin enfermedades crónicas y con defensas normales, tiene una efectividad del 95%. Ello significa que previene la infección por el VHB, la infección por VHD y su progresión a hepatopatía crónica y/o cáncer de hígado.

En la hepatitis B, la edad en el momento de adquirir la infección es un factor muy importante, pues va a condicionar la evolución hacia la cronicidad. Si la infección se adquiere cerca del nacimiento (cuando aún el sistema inmunitario es muy “inmaduro” es incapaz de eliminar el virus) y se convierte en crónica en un 90% de los casos, si la infección se adquiere en la edad infantil, alrededor de los 5-6 años, cronifica en un 30%, y si la infección tiene lugar en la edad adulta se vuelve crónica en un 5% de los casos.

Diagnóstico de la infección por VHB

El diagnóstico serológico de la hepatitis por VHB, se realiza mediante análisis específicos, con la determinación del antígeno de superficie del VHB  (HBsAg), el anticuerpo frente al antígeno de superficie (anti-HBs), el antígeno e del VHB (HBeAg), el anticuerpo frente al antígeno e (anti-HBe) y el anticuerpo anti-core del VHB, que puede ser anti-HBc IgM (denota infección aguda), o bien antiHBc IgG (diagnostica infección crónica o bien si se detecta de modo aislado indica que la persona estuvo en contacto con el VHB, pero no es seguro que sea un portador del virus). El virus B, es un virus DNA (hepadnavirus), que se instala en el núcleo de la célula formando el cccDNA integrándose en el genoma de la persona. La determinación del cccDNA sólo está al alcance de contados laboratorios. No obstante, el DNA del VHB se puede determinar y cuantificar en sangre, por lo que la identificación de los pacientes infectados podría hacerse fácilmente si aquellos que se encuentran o se han encontrado en situaciones de riesgo fueran sometidos a los análisis pertinentes.

Estas pruebas deberían efectuarse no sólo a los pacientes con manifestaciones clínicas o analíticas que muestran enfermedad hepática, sino también a aquellos que han estado expuestos a situaciones de riesgo de infección, por exposición a sangre o a material potencialmente infectado o por ser hijos de madres portadoras. Se conoce que el retraso en el diagnóstico permite la progresión de la enfermedad y la aparición de complicaciones. También cuantos más pacientes estén sin diagnosticar, van a existir más probabilidades de que se produzcan nuevas transmisiones, ya que quién desconoce que padece hepatitis B no puede tomar las medidas de prevención necesarias ni para cuidarse ni para proteger de la enfermedad a otras personas.

Tratamiento de la Hepatitis B

Se dispone de varios fármacos para tratar la Hepatitis B. Para tener información sobre todo lo relacionado con el tratamiento ver el apartado “Fármacos disponibles para el tratamiento de la Hepatitis B”.

La indicación del tratamiento de la hepatitis B debe ser valorado siempre por el especialista según las circunstancias clínicas y serológicas de cada paciente, por lo cual es muy importante que todas las personas diagnosticadas de hepatitis B crónica sigan un control periódico por un hepatólogo con experiencia.

Ninguna de las informaciones sobre la Hepatitis B de este sitio web tiene como finalidad sustituir la opinión médica especializada, sino reforzarla, así como dar apoyo e información fiable al paciente con hepatitis B y a su entorno más próximo. También queremos que la ciudadanía pueda acceder a esta información para que tenga el conocimiento necesario para pedir la prueba de la hepatitis B y esté sensibilizada y concienciada sobre la importancia de esta enfermedad transmisible.

Actualización de la Guía de la AASLD (American Association for the Study of the Liver). Update on Prevention, Diagnosis, and Treatment of Chronic Hepatitis B: AASLD 2018 Hepatitis B Guidance. Hepatology 2018; 67(4): 1560-1599.