Advierten los expertos de la ineficacia de las dietas milagro y los productos para bajar de peso, tan populares en el verano.
Según los datos del Ministerio de Sanidad, Galicia presenta la tasa más alta de sobrepeso de todo el país (con un 43,5% de la población) y ocupa el segundo puesto en cuanto a obesidad (39,3%), superados solamente por Asturias.
El problema empeora si hablamos de los datos de los más pequeños: mientras que el estudio Galinut de Rafael Tojo y Rosaura Leis, profesores de la Universidad de Santiago, indica que la obesidad infantil se ha triplicado desde el año 1979 en la comunidad gallega, el Programa Xermola de la Xunta de Galicia recoge que uno de cada 3 niños entre los 6 y los 15 años presenta índices de masa corporal compatibles con sobrepeso u obesidad.
Por eso, Carlos Moreno Lugrís, médico adjunto el Hospital Lucus Augusti (HULA) y miembro de Sogami (Sociedad Gallega de Medicina Interna), indica que este “no es sólo un problema del presente sino también del futuro”.
El doctor explica que son múltiples las enfermedades relacionadas con esta circunstancia, destacando la enfermedad cardiovascular ya que es la causa fundamental de muerte en personas obesas.
En esta línea, se calcula que un varón no fumador obeso vive unos 6 años menos que uno que no lo es, mientras que si se trata de una mujer hablamos de 7 años menos.
Además, un índice de masa corporal elevado “puede estar relacionado con una mayor incidencia en varios tipos de cánceres, como esófago, colon, hígado, vías biliares, páncreas riñón, mama y útero”, tal y como corroboran diversos estudios especializados.
También están conectadas patologías como son la artrosis, el síndrome de apnea del sueño, la infertilidad, las enfermedades hepáticas como el hígado graso, la depresión y otras enfermedades psiquiátricas, entre otras.
Teniendo como base estos efectos, el especialista indica que “muchos facultativos consideramos a la obesidad como La madre de todas las batallas”.
Riesgos en verano
Moreno Lugrís asegura que el verano es una época especialmente complicada para las personas que sufren sobrepeso u obesidad ya que “tienen más riesgos que una persona con normopeso ante las altas temperaturas, sobre todo por la deshidratación. Se debe tener en cuenta que el clima más cálido favorece la venodilatación y que, por lo tanto, hay un peor retorno venoso, aumentando los edemas en los miembros inferiores. El riesgo de trombosis y linfedema también aumenta, igual que los desequilibrios emocionales”.
En conclusión, el doctor Moreno Lugrís recalca que “el problema no está en cómo nos quede el bañador. El cuidado dietético y el ejercicio han de ser una obligación que dure todo el año. Si se tienen dudas debe pedirse un consejo profesional y no dejarse engañar por una publicidad falsa”.
Fuente: elcorreogallego.es