El abordaje de los grupos de población más vulnerables resulta clave para la eliminación de la hepatitis C.
Es uno de los temas principales que se trataron durante las jornadas ‘Nuevas Actualizaciones en Hepatología 2021’, organizadas por AbbVie, que han tenido lugar en Sevilla el 5 y 6 de noviembre. En ellas se han tratado otros temas como el manejo de las complicaciones de la hipertensión portal, las estrategias para el abordaje de la enfermedad hepática por alcohol o la importancia de la nutrición en los pacientes con cirrosis hepática.
Desde la aprobación del Plan Estratégico para el Abordaje de la hepatitis C en el Sistema Nacional de Salud (PEAHC), España ha logrado grandes avances. Este plan permite el acceso al tratamiento de todos los pacientes y bajo cualquier condición, lo que supone un antes y un después en el abordaje de esta patología. Para el Dr. Javier Ampuero Herrojo, del Servicio de Digestivo del Hospital Universitario Virgen del Rocío (Sevilla), “en este sentido, los esfuerzos actuales van encaminados a evitar lo que se conoce como agotamiento diagnóstico. Es decir, prácticamente todos los pacientes que estaban diagnosticados han sido tratados y curados. Sin embargo, quedan nichos de pacientes por diagnosticar”.
El abordaje de la hepatitis C en poblaciones vulnerables
Como se ha constatado en las ponencias, estos pacientes generalmente pertenecen a colectivos vulnerables. Entre ellos, se encuentran las personas sin hogar y aquellas que mantienen hábitos de riesgo, como las adicciones a tóxicos y las relaciones sexuales de riesgo. Para conseguir diagnosticar y tratar a estos pacientes, se han de llevar a cabo “estrategias de simplificación del diagnóstico, mediante una descentralización del mismo, que permite acercar el diagnóstico a los lugares donde se atienden habitualmente estos pacientes y estrategias de simplificación del tratamiento, de nuevo, descentralizando el tratamiento para facilitar y garantizar el acceso al mismo”, según palabras de la Dra. Marta Casado, del Hospital Universitario Torrecárdenas (Almería).
Según datos del estudio de seroprevalencia llevado a cabo en España bajo tutela del Ministerio de Sanidad, la prevalencia de serología positiva para hepatitis C es de 0,85% y 0,22% de infección activa. En cuanto a la población reclusa, se estima que los porcentajes serían de 10,2% y 1,2% respectivamente, mientras que entre las personas que han consumido drogas por vía inyectada alguna vez y que han sido admitidas a tratamiento por abuso o dependencia de sustancias psicoactivas, la prevalencia de anticuerpos frente a la hepatitis C está en torno al 60%.
Los expertos también han tratado el abordaje de la hepatitis C en la población con patología psiquiátrica. Un colectivo en el que la prevalencia de esta enfermedad es más alta que en la población general, debido a que presentan con mayor frecuencia hábitos de riesgo. Además, como ha apuntado la Dra. Casado, “ésta ha sido una población tradicionalmente menos cribada. Por ello, es fundamental la realización de cribados dirigidos en esta población, así como concienciar e implicar a los psiquiatras en esta estrategia”.
La microbiología para llegar a la eliminación de la hepatitis C
Otro de los puntos clave de estas jornadas ha sido el papel de la microbiología en el abordaje de la hepatitis C. Esta especialidad resulta esencial para llegar al objetivo de eliminación de la enfermedad, marcado por la OMS en la Agenda 2030.
Como se ha resaltado en las reuniones, la función de los microbiólogos es tan importante porque, por un lado, gracias a la evaluación de la carga viral tras la detección de una serología positiva se ha conseguido lograr el diagnóstico en un solo paso y, por otro, porque los microbiólogos “pueden ayudar a las unidades especializadas a encontrar aquellos pacientes perdidos en el sistema, que serían aquellos que en alguna ocasión han tenido una serología positiva o carga viral detectable y no han sido remitidos a una unidad especializada para tratamiento”, como ha indicado el Dr. Ampuero.
Fuente: isanidad.com